Imagino una fotosíntesis en mi vida, sí así como las plantas respiran, nosotros lo hacemos, es un sus hojas, donde se produce este proceso, consumen gases tóxicos y liberan oxígeno, por ello se convierten en la fuente de la vida!!!
Qué sería de nosotros sin oxígeno? Seguro nos asfixiamos al no poder respirar, más también –pienso- en otra reflexión, podemos hacer “fotosíntesis” para liberar problemas, por qué no?
No exactamente consumir lo tóxico, pero si aprenderlo a manejar, quizás un poco de neurolingüística, que es tan amplia; más tiene su maravilloso botón, que en las circunstancias difíciles, nos puede llevar a evocar una situación placentera (lo que bien podría ser el oxígeno), de tal manera que podemos ir liberando oxígeno, no solo para nosotros, sino como el cariño, en nuestro entorno, …
La savia elaborada se distribuye como alimento para la planta y también la almacena como reserva, nuestros logros, los hábitos que tenazmente vamos adquiriendo, nuestras fortalezas, lo que vamos aprendiendo en la vida… nos va enriqueciendo y alimentado como personas!!! Es la savia que alimenta las plantas! Y también almacenarla… retroalimentarnos, de lo que hemos alcanzado, y cómo; ayudar en lo que nos quede, de lo que ya tenemos (sean experiencias de vida, una mano amiga, un compartir…) , conforme caminamos en la vida, nos queda una gran reserva, de situaciones y sentimientos, que nos sólo enriquecen nuestras vidas, sino que pueden ayudar a otras personas : por qué no compartirla?
Fotosíntesis, energía indispensable para los procesos vitales!!! ¡Toda una maravilla!
Autor: María Asturias
Fotografía : María Asturias